Hace mucho tiempo, en un reino distante, había un rey que no creía en la bondad de Dios. Tenía, sin embargo, un súbdito que siempre le recordaba acerca de esa verdad. En todas las situaciones decía:
"Rey mio no se desanime, porque todo lo que Dios hace es perfecto, El nunca se equivoca".
Un día el rey salió a cazar junto con su súbdito, y una fiera le ataco. El súbdito consiguió matar al animal, pero no evito que su majestad perdiese el dedo meñique de la mano derecha. El rey, furioso por lo que había ocurrido, y sin mostrar agradecimiento a su siervo por salvarle la vida, le pregunto a este: Y ahora que me dices, ¿Dios es bueno?, si Dios fuese bueno yo no hubiera perdido mi dedo.
El siervo le respondió:
"Rey mío, a pesar de todas esas cosas, solamente puedo decirte que Dios es bueno, y que quizás perder un dedo, sea para su bien. Todo lo que Dios hace, es perfecto, EL NUNCA SE EQUIVOCA".
El rey, indignado con la respuesta del súbdito, mando que fuese preso a la celda más oscura. Después de algún tiempo, el rey salió nuevamente para cazar, y fue atracado, esta vez por una tribu de indios que vivían en la selva. Estos indios eran temidos por todos, pues se sabía que hacían sacrificios humanos para sus dioses. Inmediatamente después que capturaron al rey, comenzaron a preparar, llenos de júbilo, el ritual del sacrificio.
Cuando ya tenían todo listo, y el rey delante del altar, el sacerdote indígena, al examinar a la victima, observo furioso... ¡Este hombre no puede ser sacrificado, pues es defectuoso! ¡LE FALTA UN DEDO!!! Luego el rey fue liberad.
Al volver al palacio, muy alegre y aliviado, libero a su súbdito y pidió que fuera a su presencia. Al ver a su siervo le abrazo y e dijo, ¡Dios fue realmente bueno conmigo! Tú debes haberte enterado que escape justamente porque no tenía uno de mis dedos. Pero ahora tengo una gran duda en mi corazón: Si Dios es tan bueno, ¿Porque permitió que estuvieras preso, tú que tanto lo defendiste?. El siervo sonrió, y dijo:
"Rey mio, si yo hubiera estado junto con usted en esa caza, seguramente habría sido sacrificado en ese lugar, ¡ya que no me falta ningún dedo! por lo tanto acuérdese siempre: Todo lo que Dios hace es perfecto. EL NUNCA SE EQUIVOCA!!!!"
excelente
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