Una triste historia

Que feo empezar el 2015, contando una triste historia:

Era una hermosa iglesia que lo tenia todo, las bendiciones y la prosperidad era su identidad; la presencia de Dios se paseaba en medio de ellos había una comunicación tan clara tan hermosa; Dios estaba allí.

Un día Satanás orquesto una maldad, entrar pecando a esa iglesia para destruirla. Se fue metiendo poco a poco, fue tomando un lugar, luego empezó a hablar y la iglesia a escuchar, hasta que un terrible día la iglesia en su totalidad cayó en pecado y termino todo aquel proyecto, todo aquel sueño maravilloso se acabo.

Solo el pastor y fundador de aquella iglesia se mantuvo firme, y así solo, comenzó a idear la estrategia para reiniciar la iglesia, para así aprovechar toda aquella infraestructura en la cual el pastor había invertido tanto.

El nombre de aquella iglesia era muy bonito; se llamaba: el paraíso, los discípulos eran Adán y Eva y el pastor era nada más y nada menos que el mismísimo Dios; fue la iglesia perfecta que pastoreaba Dios.

Te tengo una noticia; para este tiempo el señor ha organizado una iglesia para entregar todo lo mejor que Él tiene en su trono, el Señor ha diseñado en nosotros un mover sobrenatural, al punto que ha decidido abrir las ventanas de los cielos para que nuestra congregación cejes, sea un punto de referencia del reino en esta ciudad una embajada del cielo en la tierra.

Pero sabemos que Satanás quiere hacer lo mismo que hizo en génesis, pero yo quiero que el sepa que en este lugar no va a hacer lo que hizo allá, estamos dispuestos a defender la iglesia que nos pertenece.

La bendición es grande, el ataque será grande, pero quiero informarte que la defensiva será espectacular.

Con Cristo somos más que vencedores.

Te bendigo iglesia cejes.

Pastor Humberto Ovallos

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